Sala de Estar

Una extraña serenidad me invadió. Contesté con suavidad:
- Es probable que tengas razón, Violet. Para serte sincera, preferiría que nos quedarámos en casa hoy, sólo en silencio, aunque sea unos minutos. ¿Te parece bien?

OFF: Regreso mañana. ^^

Creí que guardar silencio era lo mejor pero no es fácil introducirte en tus propios pensamientos si hay tanto desaquilibrio en tu interior. No pude concentrarme. La música invitaba a recuerdar y a pensar y a hablar y por eso mismo dije con voz tan suave como la brisa delicada del verano:
- Violet... ¿Alguna vez has conocido a alguien de quien no puedas desprenderte, pese a que lo intentes con todas tus fuerzas?

Advertí que Violet no entendía y sonreí débilmente.
- No estoy hablando exactamente de mi familia- dije. Aspiré aire para continuar pero luego exhalé y simplemente esperé a ver que me diría Violet. Había una parte de mi historia que no había podido contarle. Pero tenía que esperar.

Sonreí de nuevo, esta vez más vivazmente.
- De acuerdo- asentí- Lo haré, cuando se presente el momento.
Volví a callar y fijé mi vista en el cielo, mientras me llevaba las rodillas al pecho, pensativa.

Era bueno estar ahí, en silencio, respirando, controlando el ritmo de la respiración. Sin otra cosa que hacer, sin nada más que querer, sólo... respirando. Lenta, calmosa, pausadamente.
Y nada más. Porque ni siquiera estaba pensando.

Podía ser que Violet fuera sigilosa pero yo estaba atenta. La vi levantarse y mi intuición me dijo que algo iba a pasar.
No me moví un centímetro pero esperé, tensa, concentrada.

Le devolví la mirada y la sonrisa con afecto.
- Está bien- dije y me levanté grácilmente, entusiasmada- ¿Adónde iremos?

Me eché a reír. Supe entonces a qué se debía todo eso.
- Dame la venda y te daré mis llaves- repuse, divertida a más no poder.
Violet me dio la venda y yo le di las llaves de mi preciado Volvo negro.
La situación era tan divertida que me eché a reír otra vez, larga, regocijadamente.
- Vas a tener que llevarme cargando un trecho hasta llegar al garage de la Mansión- agregué. Volví a reírme y extendí los brazos, mientras mis ojos chispeaban, brillantes.

Sonreí y sacudí la cabeza, en una amable negativa.
Caminamos a la puerta y al llegar a ella me volví y le pregunté a Violet:
- ¿Qué te traes entre manos?

OFF: ¿Seguimos en la Mansión?

-Ya lo verás.- dije divertida y sali corriendo rumbo a la mansión, seguida de Ivy.

OFF: Sip ^^ solo vamos x tu carro y listo xDD

OFF: Ok, correré ^^

Sonreí.
- De acuerdo- dije y eché a correr.